Sábado, Agosto 10, 2013

Prosperidad

EL ESPÍRITU INFINITO ES LA FUENTE DE MI BIEN.

Aveces, quizás piense que la fuente de mi prosperidad es un trabajo o una persona específicos. O quizás considere que mi mayor posesión es un objeto en particular. Aunque la gratitud que siento por estas bendiciones aumenta mi sentido de prosperidad, sé que las personas o cosas no son la fuente de mi bien. De hecho, nada en el mundo material es la fuente de mi provisión.

Al entrar en el Silencio, recuerdo que el Espíritu Infinito es la única fuente infalible de mi bien. Doy gracias de corazón por esta verdad, reconociendo que desarrollar mi conciencia espiritual es la mayor inversión que puedo hacer para expandir mi prosperidad espiritual y material.

Si ellos escuchan y le sirven, acabarán sus días con bienestar y sus años con dicha.—Job 36:11