Sábado, Septiembre 21, 2013
Entrega
AL ENTREGARME AL ESPÍRITU, EXPERIMENTO UNA PAZ Y UN BIENESTAR PROFUNDOS.
Aveces la vida fluye sin tropiezos, y otras veces parece una batalla. Si me encuentro en oposición a las personas a mi alrededor o en conflicto conmigo mismo, determino dejar de luchar ahora. Entrego el asunto —y en realidad, mi vida— al Espíritu vivo de la Verdad en mí.
Comienzo a hacerlo en contemplación callada, soltando la armadura defensiva de convicciones fuertemente arraigadas y las armas de juicio o crítica. Éste es un acto consciente de fe y valor. Dejo ir el control y me entrego al Espíritu. En el Silencio, mi mente y mi corazón se abren para recibir las recompensas del espíritu viviente y amoroso de Dios. Al confiarme al Amor Infinito, disfruto de paz y bienestar profundos.
No confiaré en mi arco … pues tú nos has guardado de nuestros enemigos.—Salmo 44:6, 7
No hay comentarios:
Publicar un comentario